
El número de usuarios únicos de telefonía móvil alcanzó los 5.000 millones al finalizar 2017, lo que supone un grado de penetración del 66%, aunque el número de tarjetas SIM usadas por personas (excluyendo las que usan máquinas entre sí) se elevó a 7.800 millones, el 103% de los habitantes del planeta, superando así por primera vez la población mundial (7.600 millones de personas). Son datos del informe anual Mobile Economy de la GSMA, la asociación que organiza el Mobile World Congress (MWC) que se celebra en Barcelona.
Me parece súper sorprendente que las líneas de teléfono superen en número a la población mundial ya que seguramente muchas de estas líneas no las utilicemos, porque no las necesitamos. Y si contamos la porción de la población que no tiene ningún aparato o dispositivo electrónico con el que poder comunicarse y que le haga falta una línea de comunicación implica que por cada persona que tenga un teléfono hay más de dos líneas móviles, esto es una locura.